Preparación:
Cortaremos la barra de pan del día anterior en rebanadas como de un dedo de grosor y las dejaremos en vino blanco caliente durante una media hora.
Escurriremos en un colador. Las rebozaremos en huevo batido y las freiremos.
Las serviremos en una fuente o en una cestilla, espolvoreada de azúcar y canela.